Testimonios de las familias
Imagina Dormir
Testimonios de las familias
Imagina Dormir
Clara y Javier, papás de Jorge, 9 meses.
Nuestra experiencia con Ana en la asesoría del sueño ha supuesto un cambio radical en nuestra vida. Sus consejos, su trato, y su cercanía facilitaron el proceso de aprendizaje de nuestro bebé para dormir. No podíamos imaginar estos resultados cuando empezamos y ojalá lo hubiéramos hecho antes.
Tanto el inicio, como el seguimiento del proceso fueron satisfactorios y se adaptaron a nuestra disponibilidad.
Ya no imaginamos dormir… ¡¡¡DORMIMOS!!!
Y tanto nuestro bebé cómo nosotros, disfrutamos del día con energía y el momento de ir a la cama. ¡Gracias!
Patricia y Carlos, papás de Víctor, 18 meses
Voy a empezar dándole la gracias a Ana. Ha sido un proceso complicado, pero ella ha estado con nosotros en todo momento.
Víctor tenía 18 meses cuando contactamos con Ana. Él sólo se dormía en brazos o porteado en la mochila. Tardábamos una hora en dormirlo, tanto en la siesta como por la noche. Las siestas eran súper cortas, tardábamos más en dormirlo que el tiempo que estaba dormido. Para dejarlo en la cuna teníamos que ser súper «ninjas» y él tenía que estar súper dormido, si no se despertaba y vuelta a empezar…. era desesperante.
Hablando de desesperación… también tenía despertares nocturnos, muchos y duraban horas, sentíamos que no descansaba bien, ni de día ni de noche y lo teníamos normalizado. Pero llegó Ana a nuestra vida ❤️ para enseñarnos a todos buenas costumbres, nos dio consejos y ya nos hemos olvidado de todos esos momentos mencionados.
Víctor sabe gestionar solo los despertares nocturnos y ya no reclama a los papás. ¡¡¡Las siestas duran dos horas y tampoco se despierta en la siesta!!!
Ana nos dio confianza para poder lograrlo, lo veíamos imposible. El camino es duro pero el resultado merece la pena, por fin Víctor tiene un sueño reparador, y se le nota en el carácter.
Gracias Ana.
Natalia, mamá de Rodrigo, 16 meses
¡¡LO QUE “IMAGINA DORMIR” HACE ES MAGIA!!
Nosotros partíamos de una situación difícil, bebé de 16 meses que dormía en cuna colecho desde que nació y después en cama de los papás, tomaba pecho a demanda, y por la noche demandaba mucho, tenía multitud de despertares y si no estaba con él en la cama se despertaba a los 5 minutos. Yo no podía dormir bien, no descansaba, y tenía que irme a dormir cuando lo acostaba a él. Y de repente llegó ella, ANA ha sido nuestra salvadora, nuestra HADA DE LOS SUEÑOS que sacó su barita mágica y tocó a nuestro hijo. ¡¡En tan sólo un mes ha conseguido que nuestro hijo duerma en su cuna, en su habitación y que se duerma sólo!! Ni siquiera tenemos que esperar a que se duerma… lo metemos en la cuna, nos vamos, y él sólo se duerme, y lo hace durante toda la noche, entre 10 y 11 horas diarias. No tengo que ir a su habitación ni una sola vez. Y lo ha hecho de forma totalmente respetuosa para nuestro hijo, poquito a poco, apenas lloró, sólo los primeros días. ¡¡Lo pienso y todavía no me lo creo!! Ha cambiado nuestras vidas. ¡¡Por fin podemos dormir, y he recuperado mi independencia nocturna!! Repetiría con ella sin dudarlo, empatiza muchísimo contigo, te quita todo tipo de culpa, resuelve tus dudas y te da unos consejos que si los sigues, realmente ves los resultados antes de lo que te habías imaginado, no sé cómo, pero hace que sea un camino fácil. Ha sido una suerte encontrar a «IMAGINA DORMIR» y es la suerte que necesitáis todos aquellos papás que no podéis dormir, la recomiendo 100%, con los ojos cerrados y el corazón lleno de gratitud. ¡¡Gracias, gracias y mil gracias!!
Alba y David, papás de Marco, 27 meses.
VOLVER A DORMIR.
Para nosotros ha sido un antes y un después. Tras 2,5 años sin saber lo que es dormir más de 2h seguidas y con despertares frecuentes, que podían oscilar entre 4 y 8 cada noche…la desesperación era nuestro día a día.
Desde el primer momento confiamos en Ana, que resultó ser todo un descubrimiento y un halo de esperanza en nuestras noches. Un mes de trabajo intenso y ahora podemos decir que dormimos del tirón, tanto nosotros como nuestro pequeño y si se despierta, lo gestiona solito y se vuelve a dormir.
Paloma, mamá de Carla, 12 meses.
Temía que llegara la noche, los despertares eran continuos, había noches que las pasaba con la mochila de porteo. Las siestas eran un desastre. Mientras no tuve que incorporarme, sobrellevamos la situación, pero la vuelta al trabajo era insostenible sin dormir…
Empatía, comprensión y acompañamiento es lo que Ana nos dio, a día de hoy, somos una “nueva” familia, todos descansamos y por día disfrutamos.
La única pena es haber esperado tanto para cambiar esto.